Vale, vale, es para creérselo. Es el primer actor español en ganar un Oscar de Hollywood al mejor actor en la historia del cine. Ha logrado tener una imagen internacional, trabajar con Milos Forman, Woody Allen, Michael Mann, Los Hermanos Coen... y ahora dice que se toma un año sabático. Por supuesto, está en su derecho, que para eso se lo ha currado a base de bien pero...¿dejar tirado a Francis Ford Coppola? Eso es muy fuerte para cualquier actor -incluído Bardem- y parece más una pose snob que otra cosa. Si a eso sumamos que tampoco va a estar en la versión cinematográfica del musical "Nine" -en la que iba a estar con su presunto (y actual) amor Penélope Cruz- la cosa es para preocuparse. ¿Se lo habrá creído? ¿Estará demasiado embriagado del éxito? ¿Es una opción inteligente dejar en este momento su carrera consolidada internacionalmente? ¿Es un actor o un divo? ¿Padece el Síndrome de Daniel Day-Lewis? Preguntas sin respuesta para un incuestionable magnífico actor, pero también algo singular en su comportamiento y actitud. Ahí queda la brecha abierta para que muchos puedan preguntarse por su decisión, para que otros encumbren aún más al actor en un mito, y los más para que desee que se vuelva a poner delante de una cámara, sea española o norteamericana. También queda pendiente ese rumor de boda entre el actor y Penélope Cruz, además de todos los proyectos que tiene en los USA -entre los que está "Killing Pablo", dirigido por Joe Carnahan, junto a Christian Bale, y donde da vida al narcotraficante colombiano Pablo Escobar-.
1 comentario:
Es muy buen actor y es normal que esté cansado. Yo habría hecho lo mismo, joder, que siempre estamos con la escopeta cargada!
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