Más de quince millones de espectadores. Toma. Ni Hulk, Indiana Jones, Iron Man y su puta madre han logrado ni arañar esos 15.372.000 espectadores que siguieron los penaltis de ayer en el partido de cuartos de la Eurocopa de fútbol entre las selecciones de España e Italia. Tela marinera. Un 77,5 % de cuota de pantalla, convirtiéndose en lo más visto de la historia de la televisión. Ni "CSI", ni "El Equipo A", ni "Betty la fea", no señores. El fútbol. Ese es el negocio. El cine y la televisión ya no lo son, o no lo son al nivel del fútbol. Cuando Jim Carrey, Tom Hanks, Nicole Kidman o Scarlett Johansson ven ninguneados sus sueldos, Cristiano Ronaldo dice que se quiere ir al Real Madrid por que le sale de los cojones, cláusula de rescisión incluida, y Ronaldinho dice que no tiene ganas de jugar más en el Barcelona. Beckham ya tiene linea de perfume, moda e imagen, y todos son multimillonarios. Ya no se trata de hacer soñar la gente en una pantalla, sino dentro de un campo de fútbol, dándole pataditas a un balón. Hala, que se vaya a hacer puñetas la cultura, y viva el entretenimiento. ¿Me habré equivocado toda mi vida amando el séptimo arte, como forma de evadirme y soñar, cuando en realidad es el fútbol lo que más ilusiones podría haberme provocado? 
¿Me habré equivocado?
Más de quince millones de espectadores. Toma. Ni Hulk, Indiana Jones, Iron Man y su puta madre han logrado ni arañar esos 15.372.000 espectadores que siguieron los penaltis de ayer en el partido de cuartos de la Eurocopa de fútbol entre las selecciones de España e Italia. Tela marinera. Un 77,5 % de cuota de pantalla, convirtiéndose en lo más visto de la historia de la televisión. Ni "CSI", ni "El Equipo A", ni "Betty la fea", no señores. El fútbol. Ese es el negocio. El cine y la televisión ya no lo son, o no lo son al nivel del fútbol. Cuando Jim Carrey, Tom Hanks, Nicole Kidman o Scarlett Johansson ven ninguneados sus sueldos, Cristiano Ronaldo dice que se quiere ir al Real Madrid por que le sale de los cojones, cláusula de rescisión incluida, y Ronaldinho dice que no tiene ganas de jugar más en el Barcelona. Beckham ya tiene linea de perfume, moda e imagen, y todos son multimillonarios. Ya no se trata de hacer soñar la gente en una pantalla, sino dentro de un campo de fútbol, dándole pataditas a un balón. Hala, que se vaya a hacer puñetas la cultura, y viva el entretenimiento. ¿Me habré equivocado toda mi vida amando el séptimo arte, como forma de evadirme y soñar, cuando en realidad es el fútbol lo que más ilusiones podría haberme provocado? 
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6 comentarios:
Te ibas a esa hora al hospital y no habría enfermos ni de urgencias, seguro.
Yo fui a un restaurante japonés habitual -que suele estar siempre hasta la bola- y ¡¡¡eramos los únicos aparte de los camareros!!
En fin...
por suerte para unas cosas y por desgracia para otras, nada supera al fútbol. Es lo único que nos une de esa manera a todos los españoles. Y no debería ser así, debería de haber otras cosas que nos hicieran sentir así.
un abrazo!
Me da mucha pena que nuestras "señas de identidad" sea el fútbol. Volvemos al "Pan y Circo" de los romanos...
En fin...
Creo, que soy de los pocos que se ilusionan igual viendo lo último de Fincher, revisionando tanto a Kubrick como a Wise o esperando lo próximo de Cámeron. Pero también creo que soy de los muchos que se ilusionan viendo un partido de fútbol. Y señor Casado no creo que se haya equivocado al elegir, y lo que es mejor: dudo mucho que hayamos perdido nuestras señas de identidad,lo de la cultura ya es otro cantar, y no todo es culpa del fútbol se lo aseguro, que por otra parte y por mucho que os desagrade también es otra de nuestras señas de identidad( si no conocéis el famoso gol de Zarra o el 12-1 a Malta...). Que yo sepa y hasta la fecha, los valencianos llenan sus calles en las fallas, los sevillanos las suyas en Semana Santa o feria( aquí hablariamos del real claro), los más playeros las playas en verano, los más taurinos las plazas, sobre todo cuando cuando el torero "de moda" da unos cuantos capotazos; mientras los cinéfilos o el humilde público de a pie siguen y seguirán abarrotando las salas para ver el estrenazo de la temporada ( Se lo digo yo que tuve que reservar las entradas para Indiana Jones unos cuantos días antes), los aficionados a la lectura ligera seguirán reservando el último Best Seller y los televidentes, y aquí damos un toque a la cultura, seguirán fijos frente al televisor cuando series de una más que mediocre catadura( si quiere empezamos a enumerar autenticas joyas del intelectualismo como "Los hombres de Paco", y de ahí para arriba) vomitan su último capítulo. Los mismos televidentes apoyaron al inefable Chiki-Chiki ( Creo que Augusto Algueró aún se está revolviendo en su tumba)y otros apoyan "Muchachada Nui", una bastardada (pero con un 99% menos de gracia) entre "El informal", "Gomaespuma" y los "Monty Python", y que no solo es objeto de culto entre "los nuevos intelectuales" sino que se ha convertido en el DVD mas vendido en los últimos tiempos ( podían haber sido la edición de coleccionistas de "Solo ante el peligro", los films de Godard en su etapa Dziga Vertov, "El otro" de Mulligan o la edición del Drácula de la Hammer, vamos digo yo). ¿ Y a usted señor Casado le preocupa el share de un partido de fútbol o las señas de identidad? Share que por otra parte se preveía; teniendo en cuenta que eran unos cuartos de final de una Eurocopa de Naciones ,que se celebra cada 4 años, y la oportunidad de que España se metiera en semifinales, rompiendo así un maleficio que dura décadas y convirtiendo de camino el asunto en un hecho histórico, siempre entre comillas evidentemente. De todas formas no hay por qué alarmarse señor Casado ya que esas cuotas de share sólo se consiguieron en la definitiva tanda de penalties, así que la media general fue solamente discretamente alta. Sé que los amantes de cine somos una inmensa minoría y que los amantes del futbol son la inmensa mayoría. Pero no se preocupe señor Casado que el segundo nunca fagocitara al primero, porque, y se lo digo por la experiencia de disfrutar de ambos, conviven a la perfección y sólo en contadas ocasiones el fútbol molesta al cine ( soy de los que pienso, y me reitero, que las mediocres e inusitadamente exitosas series patrias hacen más daño al cine y de paso a las neuronas).
Perdón por una pedorata pero creo que el post merecía la opinión de un aficionado a ambas cosas.
También es verdad que todo se podía haber resumido en : ¿Y busca usted cultura en la España del Chiki Chiki, Los hombres de Paco y Muchachada Nui? Pero me gusta hablar y no puedo evitarlo.
Un saludo a todos de un humilde servidor que aún recuerda con nostalgia cierta época de buena música de cine en Radio Aljarafe.
Me alegra muchísimo esta respuesta, Vagamundo. Es más, me encanta estar errado (al parecer, con H) por renegar de un espectáculo tan español como el fútbol; quizás haya sido un edipo mal resuelto o vaya Vd. a saber, pero siempre odié el fútbol. Y quizás por eso también me refugié en el cine: cuando mis compañeros de colegio se daban patadas como bestias por un balón, yo miraba huidizamente las fotos de Sofía Loren, Marilyn Monroe y en convertirme en Clint Eastwood enfrentándome a los pistoleros más malos al oeste del río Pecos. Estoy completamente de acuerdo contigo, y que hay muchas series nacionales con ínfulas de series americanas (como bien dices, "Los Hombres de Paco", "Hospital Central", y otras tantas) que hacen en efecto mucho más daño a la cultura popular. Pero no es menos cierto que hay otras más -como "Aida" o "El Internado"- que no tienen que envidiar a ninguna serie de ningún país.
Con la mano en el corazón, Vagamundo, le envidio; me encantaría poder disfrutar igual de un ciclo de Mizoguchi que de los cuartos de final de la Eurocopa, y de la vendetta de "EL padrino II" que de un gol de (ponga ahí el nombre del futbolista que prefiera). Estaría mucho más integrado en mi ciudad y en mi país. Coincido también con Vd. en disfrutar por igual de las señas culturales (y sociales) de mi ciudad, como de la cultura -yo he sido "Armao" de la Macarena más de 20 años, y también me gusta un concierto de Bruce Springsteen o el sushi...-. Pero lo del fútbol, qué le voy a hacer, me puede. Lo siento y me alegro por la gente que lo disfrute, pero yo -seguro que es culpa mia...- le veo mucho más mérito y profundidad a un plano secuencia de Welles que a una falta fuera del área tirada por Beckham, o a una partitura de Elmer Bernstein que a un penalty de Ronaldinho.
En cualquier caso, bienvenido sea su comentario en este humilde weblog que espero disfrute. Gracias por venir.
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